Desconocidos, y no por ello menos queridos, Reyes Magos, en este año que aún está pasando desearía, en primer lugar, un puñado de sueños auténticos, una esperanza cierta y desnuda que pueda regalarme cada vez que cometa el error de pensarmme desgraciada; un motivo, tan importante como ficticio, que me dirija el paso. Quiero saber discernir entre lo que está bien y lo que esta mal, y no sufrir de amnesia bajo cualquier torpe y adulto pretexto. Construir una fe que no se quiebre con la caida de un angel. Aprender a hacer añicos los reproches que no me pertenecen y olvidar los nombres que ignoran quien soy y sin embargo se apropian de mis susurros, que sólo a mí me dicen. Encontrar un silencio en el que poder adivinar todo lo importante. Además, desearía corregir la arrogancia natural que exhibo a veces (que no me salva pero que me sirve de escondite). Quiero un miedo que sobreviva a todas mis certezas. Alegrarme con los días. Aprender a despedirme. Aprender a presentarme. Reírme de las ilustres sombras, propias y ajenas, que siempre disponen de la parcela adecuada donde enterrar la mala conciencia sin mancharse el traje de los domingos. Quiero un huerto donde sembrar la risa y el asombro.
Ilustres majestades, por último, quisiera un espejo que cuando me mire me devuelva a la niña que siempre quise ser. Superar todos los exámenes que la vida me impone sin necesidad de copiar. Y sobre todas las cosas, me pido, si es posible, un final feliz.
12 comentarios:
Cuando los reyes lean esta foto, no dudaran en entregarte lo que deseas, a cambio, pedirán tu sonrisa. Lo sé. muakkk
Jo...yo también quiero eso. ja,ja.
Ojalá Sus Majestades sean generosos contigo. En mi carta se lo haré recordar.
Como dice Cat's yo también creo que como compensación te pedirán una sonrisa.
El año que viene nos tenemos que poner como deberes trabajar por ser felices, no crees?
Un beso.
Tu crees, Cats? Es mi primera carta a los Reyes, y no se si me he pasado. Je, je. Por supuesto que les daré mi sonrisa. Besos gatunos.
Gracias Arantza por interceder por mí ante sus majestades. El año que viene continuaré buscando pedacitos de felicidad para repartir entre gente encantadora como tú. Abrazos fuertes.
....Encontrar un silencio en el que poder adivinar todo lo importante...
Esta frasé me mató!
Con una carta así, no hay rey mago que se resista!
Gracias por pasar mi guarida. Hermoso blog, intensas tus letras. Volveré por aqui...
Besos!
Hola marea, gracias a ti por tus palabras. Estaré encantada de que te asomes por aquí. Yo, con tu permiso, seguiré visitandote.
Qué placer da leerte! qué soñadora eres! tu optimismo y fé me contagian cada vez que visito esté sitio, este sitio que es tan tuyo!
Se agradece, se disfruta, y trasciende.
Creo que tengo que escribir varias cartas!
Un saludo, y abarazo desde aquí!
Risa y asombro...
Quisiera yo también superar los exámenes sin necesidad de copiar, o mejor, que ya no hubieran exámenes. Ni tampoco la necesidad de de discernir lo que está bien de lo que está mal, ya que constantemente tengo o me hacen cambiar de opinión.
Pero, me he dejado llevar, la carta es tuya, casi me olvidaba...
Así que, mi mejor deseo es que tus deseos se cumplan, no en su totalidad, ya que siempre es bueno tener a algo a que anhelar.
Me alegro que las conjunciones astrales, los malabarismos de la red o el inconsciente colectivo (tanto da) nos haya puesto en contacto. Es un privilegio leerte y que me leas.
Un fuerte abrazo y un beso!
Tu final feliz es ser como eres Olvido. ¿Me prestas la carta?
Hoy te siento muy cerca.
Besos.
Ingenua, es cierto que soy una soñadora sin remedio. Eso me salva. Este sitio se está conviertiendo poquito a poco en un espacio mágico donde las palabras vuelan hacia otros. Es un placer que te contagie de buenas cosas.
Gárgola, secundo tu opinión. No sabes cuánto me alegro de que hayamos coincidido de esta forma, y yo también me siento feliz (esa es la palabra) de que cada vez que te visito regrese con el corazón lleno. Besos fuertes.
Cristal, la carta es toda tuya. Qué bien que me sientas cerca, que te sirvan mis palabras para algo, que te haga pensar o sentir o sonreír o incluso llorar. No sé. No te conozco pero entiendo que a veces tan poco hace falta para sentir que estamos extrañamente cerca. Abrazos gigantes.
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